domingo, 8 de abril de 2007

Diálogo entre Él y el Duende Misántropo (Parte I)

Era tarde. Siempre es tarde. Le gusta la noche. Le gusta la luna. Aunque su brillo provenga del sol le gusta más que éste. Estaba sentado, frente al ordenador. Escuchando música. Pensando en todo lo que siempre piensa, pero con una vuelta de tuerca más, con un pensamiento nuevo.

Notó como se arrugaba el hombro derecho de su chaqueta. Se giró para ver que sucedía. La gente suele mirar. Él ve. Observa. Al igual que oír no es lo mismo que escuchar, mirar no es lo mismo que ver. Hay un matiz muy grande que los diferencia. La indiferencia. Ahí estaba. Un personajillo que no mediría más de veinte centímetros, en su hombro. Llevaba barba de tres días, y el pelo de las sienes cano, el resto negro. Vestía normal. Unos vaqueros. Unas zapatillas negras. Una chaqueta marrón oscura. Sus ojos eran verdes oscuros, y tenía ojeras. Lo que llamaba la atención es que llevaba un gorro verde en su cabeza. Se sentó a lo ancho de su hombro, dejando la pierna izquierda estirada, y la derecha flexionada. La boca le olía a ron.

Él se mostraba curioso, no asustado. Escudriñaba con su mirada todos los detalles del personaje.
-¿Quién eres? -Le preguntó.

-Soy el duende misántropo. - Respondió, con voz grave. Como si fumara. Pero no fumaba.- Soy quien aparece en tus pensamientos, haciendo que mires con amargura todo aquello que te ocurre. Soy el que hace que acabes odiando tus relaciones sociales, porque todas te conducen a lo mismo. Al dolor y al sufrimiento. Y no pretendo hacerte huir de ello. Que odie a la condición humana, no significa que tu hagas lo mismo. En cierto modo no me gustas. Lo que hace que tu tampoco te gustes a veces. No soy pesimista con respecto a las relaciones sociales. Tan sólo observo desde tu interior. Evoluciono junto a ti. Soy realista con respecto a ellas.

-Yo no odio la condición humana. Tampoco es que sea un filántropo. El que me haya llevado ciertas desilusiones o desengaños con ciertas cosas no significa que siempre tenga que ser así, o con todo el mundo. No puedes despreciar a la condición humana basándote en una experiencia individual, en éste caso, la mía.

-Eso son tan solo idioteces. Los palos que te has llevado no significan nada. El hecho de que hayas sufrido ahora, no implica que lo vayas a pasar mejor en un futuro indeterminado. Y con el resto de las personas, lo mismo. El hecho de que sean felices, no implica que lo sigan siendo. No me baso solo en tu experiencia personal. Lo que he observado en tus ojos, es lo que hace que piense así. No solo hemos observado tus relaciones con un grupo limitado de personas. Es lo que puedes ver en todos sitios. Analizo los instintos de la persona, no solo las intenciones. Y me fijo que siempre están movidos por instintos egoístas. Tu y todos. Crees que actúas bien. Crees que lo haces porque los demás lo merecen. Y no. Lo haces porque esperas una recompensa. Que tu presente, cambie a ese futuro indeterminado e hipotético en el que no sentirás sufrimiento ni dolor. Y eso no es así. La mayoría de las cosas son fruto del azar. Tienes que aprender a distinguir entre sincronías y azar. Si siguiéramos ese pensamiento, habría que nombrar a los del Kuklux Clan reyes de la Tierra. Porque si actúas bien en un presente para obtener buenos resultados en un futuro, crees en ello. Crees que siendo buena persona, actuando racionalmente, viviendo bien y todo ese rollo aristotélico, conseguirás una recompensa en un futuro. Y si actúas mal en el presente, tu futuro estará lleno de tu presente. Dolor y sufrimiento. Seguirá siendo igual. No cambiarán. Y entonces, ¿qué pasa con los negros de África?. Habría que exterminarlos según esa ideología. Por el siguiente silogismo. Los negros africanos sufren siempre. La gente que es mala sufre siempre. Luego los negros africanos son mala gente. Hay que eliminar el sufrimiento y la gente que lo ocasiona. Luego, hay que matar a los negros. Y mientras tanto, la buena gente de acá arriba, al norte y a la izquierda (manda cojones) a vivir bien. ¿Qué nos sentimos culpables por ellos alguna que otra vez? Tranquilos. Alguna manifestación de "No más sangre por petróleo" y arreglado. A casita en nuestro coche, con una sonrisa de satisfacción por haber mejorado el mundo. ¿De gasolina? Qué va... El coche se alimenta de buena voluntad. Como vuestras almas. Como vosotros mismos, tú y el resto, alimentáis vuestro egocentrismo. Todo lo que os rodea sirve para ello. Para taparos la vista. Para que viváis cebados de vuestra propia existencia. Idiotas.

-¿Y qué quieres que le haga? ¿Qué quieres que hagamos? Alimentar el egocentrismo es algo inherente a la condición del ser humano. Cierto que una parte de la humanidad ha progresado y la otra no. Cierto que la que ha progresado, ha taponado el progreso de la que no para poder mantener el tren de vida que llevamos. Es una evolución de los problemas. En África los problemas de la gente es preocuparse de no morir de hambre. No tienen tele para ver como sus adinerados mandatarios, colocados por los gobiernos antaño colonizadores, lanzan mensajes sin sentido. En sus palacios. En sus Vaticanos particulares. Y, como nosotros no tenemos problemas para morirnos de hambre, tenemos todas las necesidades básicas cubiertas, hemos ascendido a otro nivel. El cuerpo está bien. Toca satisfacer el ego. Cubrir sus necesidades básicas. Psicólogos, Operación Triunfo, Salsa Rosa, etc. Necesitamos masajear nuestro ego. Tenemos problemas. Como los míos, como los de los demás. Ocasionados por nuestro mejoramiento. La vida es una continua resolución de problemas. Nacemos, y comienza nuestro camino. Como no tenemos que sobrevivir, sino vivir solamente, tenemos otros problemas distintos a la obtención de alimento, infraestructuras, hospitales, etc. La resolución de un problema ocasiona otro. Y así continuamente. Un bucle interminable. Nuestros problemas son de tipo egocéntrico. El amor, las relaciones sociales, la amistad, la calidad del trabajo, etc. Necesitamos esos problemas. No los podemos evitar. Son inherentes a nuestra naturaleza. Necesitamos problemas y el continuo proceso de resolverlos. En eso nos va la vida. A nosotros y a los africanos, asiáticos, y demás gente sin recursos. Preferimos esos problemas, porque vivimos más. Es una especie de eutaxia aplicada al ser humano. Nuestros problemas a escala individual no importan, pero tendemos a sobreponerlo a todo lo demás, porque somos así.

-Ese es vuestro problema. Lo dices, sin inmutarte. Egocentrismo. Os creéis el puto centro de todo. Vagáis por la vida. Sois una criatura egoísta, consentida y narcisista. Los guapos, por colocar vuestra belleza en el pedestal de vuestro egocentrismo. Los feos, por culpar al mundo de vuestra cruz, por quejaros de que cierta gente no os acepta por como sois a superficie epidérmica. Las apariencias. No sois quienes sois. Sois lo que aparentáis ser. Os disfrazáis continuamente. Me rio de vuestras modas. ¿Converse? ¿Cinturones de hebilla ancha? ¿Pantalones por los tobillos? ¿Mostrar vuestros "súper-fashion-gallumbos"? (me permito la creación del neologismo). Llevar vaqueros rajados, para aparentar ser pobres. Paradójicamente, pueden costar trescientos euros. Qué bonito es aparentar ser pobre. "Cultura underground". Os disfrazáis por fuera para ocultar quienes sois por dentro. Criaturas perdidas. Vuestra soledad os coloca en la cima y centro del universo. Toda la cultura circunscrita. Tanto arte moderno [mierdas enlatadas a tres mil euros/ lienzos de uno por uno en blanco que dicen ser una metáfora de la nada, cuando en realidad son una metáfora de la inteligencia de los que se quedan asombrados por ese engaño, y más del que paga capullomil euros por ese papel higiénico a escala del ego del ser humano/ poner el "lienzo-escotex" al lado de la televisión, mientras sale uno de esos bonitos anuncios en los que cuatro huesos negros con cabeza muestran malnutrición infantil nos piden con los ojos, y lo mismo la televisión con su sonido, un euro al día, eso si que no tiene precio. Que lo paguen los putos famosos, en vez de pedir al proletario que lo haga, joder con los profesionales mal remunerados llamados famosillos y "actores" (resalto lo de entre comillas)]. Tanto cine en plan Almodóvar. No nos podemos meter con él, porque cuando se muestra la violación de una chica y a la chica "le mola", no es otra cosa que cultura y no puedes meterte con ello. ¿Mar adentro? Bah, tan solo es una alegoría de la eutanasia, la representación de un lavado de cerebro, es preciosísima. ¡A, sí!, también sirve de inspiración para una peli porno (para los que sean cortos de entendederas, "Más adentro"). Qué bonito todo joder, ¿a que si? Todo para adormilaros de los problemas que realmente merecen la pena.

Canción: El duende del parque - Extremoduro